Sí, hoy es nuestro aniversario. Por difícil que parezca creerlo, tú y yo compartimos un aniversario. Hoy hace (no exactamente, porque la Semana Santa es móvil) treinta y dos años que abusaste sexualmente de mí, aquel Jueves Santo de mis once años, cerdo. Hace muchos años que estás muerto, y como tampoco creo en el más allá, sé que no vas a poder leer esto. Sin embargo, he pensado que ya es hora de poner por escrito y hacer público lo que ocurrió, no como terapia (creo que ya no la necesito) sino para dejar constancia de quién eras y de lo que me hiciste, y sobre todo para dejarte claro qu...