Una disputa con Murueta retrasa la construcción de 90 viviendas sociales en Busturia.

Las 90 viviendas protegidas que el Gobierno vasco tiene previsto construir en el área de Presape de Busturia sufrirán dos años de retraso. Las obras, cuyo inicio estaba previsto para finales de 2005, se han demorado debido a la oposición del Ayuntamiento de Murueta y a la entrada en vigor de la nueva ley del Suelo. Las negociaciones de Busturia con la localidad vecina para resolver un conflicto con los límites municipales han fracasado después de tres años de reuniones.

El Consistorio de Murueta se muestra contrario al proyecto porque, a su juicio, parte de estos terrenos son suyos según unos lindes antiguos que discurrían por el canal de recogida de aguas de los molinos y que separaban ambos municipios. Sin embargo, un acuerdo municipal posterior que modificó esta frontera y por el cual se basa el Instituto geográfico da la razón al Ayuntamiento de Busturia y amplía el terreno de propiedad local donde se edificarán las viviendas. «Entre las negociaciones hemos llegado a cederles una decena de pisos para los vecinos de Murueta y ni con esas», aseguró el alcalde de Busturia, Javier Gondra.

Como no se ha llegado a un acuerdo entre ambas localidades, la Diputación será la institución que medie y definitivamente apruebe el plan para que posteriormente le conceda el visto bueno el Gobierno Vasco. «Oficialmente el instituto geográfico es el que da las directrices a la Diputación y el que delimita el mapa cartográfico exacto», explicó.

La nueva ley del Suelo aprobada el pasado mes de septiembre también ha influido en el retraso «ya que nuevamente el plan de las viviendas sociales debe someterse a información pública, periodo de alegaciones y demás permisos. Por lo que al menos se retardará otros seis meses y las obras no comenzarán hasta finales de 2007», anunció.

El máximo mandatario busturitarra aseguró que este proyecto cuenta también con el rechazo de la oposición municipal y los ecologistas. «Desde el Consistorio intentaremos realizar todo lo que sea posible para que no se demore aún más. Es más, estamos en negociaciones para que el futuro puente de la variante que discurre justo encima de las viviendas no se contemple y desaparezca del planeamiento urbanístico», indicó. El Ayuntamiento de Busturia ha invertido un millón de euros en la compra de los terrenos.