Rechazan el plan de restauración de arroyos en Busturia.

Para Zain Dezagun Urdaibai, la actuación es «costosísima, ineficaz y agresiva».

El colectivo Zain Dezagun Urdabai ha pedido al Ejecutivo de Lakua y al Ayuntamiento de Busturia, que rechacen en el proyecto de reposición de defensas y restauración de los arroyos Amunategi, Mape y Tribiz, que consideran «costosísimo, ineficaz y agresivo» hasta el punto de que contraviene diferentes normativas ambientales.

Zain Dezagun Urdaibai, colectivo dedicado a la conservación y protección del patrimonio natural, cultural e histórico de la zona, ha dado la voz de alarma sobre otro proyecto con sede en Busturia, que atenta contra diferentes normativas vigentes en materia de protección ambiental.

Señalan en una nota que el Ayuntamiento ha publicado un proyecto elaborado por la Dirección de Aguas del Departamento de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Gobierno de Lakua para la reposición de defensas y restauración de los arroyos Amunategi, Mape y Tribiz. La actuación, según precisa Zain Dezagun Urdaibai, consiste básicamente en reponer las escolleras desmoronadas tras el periodo de lluvias torrenciales registradas en agosto de 2002.

La ejecución de estas obras supondría, a juicio de la asociación busturiarra, «endurecer más aún» los cauces mediante la utilización de elementos constructivos como escolleras y hormigón «que ya han dado problemas anteriormente». Frente a esta opción critican que no se hayan evaluado técnicas de ingeniería biológica ni se realice un diagnóstico pausado para atender el origen del problema. De hecho, la asociación señala que proyectos impulsados por el Ayuntamiento, como los de Etxezarre o Presape, «incrementan los riesgos de inundación y de procesos erosivos».

De ejecutarse el proyecto en los términos que se plantea, Zain Dezagun Urdaibai avanza que «vendrán nuevos periodos tormentosos y cada una de estas intervenciones provocarán nuevos daños, que nunca antes se habían dado», por lo que «nuevamente solicitarán grandes inversiones públicas para paliar la miopía, osadía e ignorancia de nuestros gobernantes».

Zain Dezagun Urdaibai plantea que los problemas detectados en Busturia coinciden con el contexto general de «presión extrema sobre los cauces» y recuerda que «la degradación derivada de la política de encauzamiento de nuestros ríos es particularmente intensa por la gran densidad de población y su ubicación en estrechos valles, ocupando muchas veces los mismos cauces».

El colectivo conservacionista subraya, en este sentido, que por el desconocimiento de lo que ocurre aguas arriba, estos nuevos proyectos «empeorarán más aún el estado ecológico y funcional de nuestros cauces y agravarán el riesgo en lugares no sometidos».

Recurrirán a Europa