UPN utiliza Etxabakoitz para fines electorales y afirma que derribará edificios antes de fin de año

Hace unos días ya hablábamos de que el Gobierno de Navarra y ayuntamientos de la Comarca de Pamplona habían iniciado los tramites administrativos para construir una gran urbanización y dar cabida así a la estación del TAV en Etxabakoitz. Pues esta semana "pre-electoral" han sacado mas noticias, y las han aprovechado para su particular campaña "pro-infraestructuras": Los edificios industriales abandonados del barrio de Etxabakoitz situados junto a la avenida de Aróstegui, serán derribados antes de que acabe el año. Al parecer eso es lo que contempla el Proyecto de Urbanización del PSIS del Tren de Alta Velocidad (ellos le llaman de Altas Prestaciones). Y por allí hemos visto en la prensa y televisión a los candidatos por UPN a la alcaldía de Iruñea y al Gobierno Foral...

Lo "curioso" del caso es que ya afirman que derribarán varios edificios, la antigua fábrica de Argal y algunos edificios cercanos, y sin embargo, aun no se ha presentado en exposición pública todo el proyecto. Se supone que en el proceso de exposición pública se podrán presentar alegaciones, y que tras su análisis, se decidirá como es finalmente el proyecto... Y sin embargo, los políticos de UPN ya parecen haber decidido algunas cosas... sin esperar a ver lo que la gente piensa y decide. No parece que hayan entendido bien que es esto de "la democracia"...

En fin. Si os interesa el tema, podéis verlo en Diario de Noticias, Diario de Navarra, y también en la web del Ayuntamiento de Iruñea, que se supone que es quien ha aireado la noticia. En resumen: Se trata de dos edificios industriales abandonados situados junto a la avenida de Aróstegui número 24. El Consejo de Gerencia de Urbanismo estudiará dos convenios que permitirán adelantar el derribo de estas edificaciones. La parcela 2700 es propiedad de Inmobiliaria Urquía S.A. mientras que la parcela 2652 es de Tallunce S.L., la mercantil que tras el cierre de Argal utilizó el espacio para una empresa de catering y que también cesó en su actividad. En la actualidad, los edificios y sus dependencias se encuentran en un estado de conservación malo con zonas muy dañadas por actos vandálicos y que el convenio describe como “insalubre” así como un riesgo para las personas. El coste de estos derribos, valorado en 572.596 euros, será repercutido en la primera cuota de urbanización del PSIS, que se girará una vez aprobados definitivamente los proyectos de urbanización y reparcelación.