COPLILLAS CONTRA EL AUTO

---

 

Goizian argia hastian esnai, lemiziko autoen burrunba txorien txioekin nahasten zela, Tuitlantidan barrena abiatu naiz bestelako txioen xerka, eta –hara non!– beleren baten karranka balitz bezala txio honek belztu egin dit gogoa eta goibeldu bihotza: “Por primera vez en 22 años una mujer pilotará en un GP de la Fórmula 1”, azpian emakumezko irribarre-behartudun baten erretratoa dakarrela. Hementxe ikus dezakezue:

 

https://twitter.com/ActualidadRT/status/483410879418208256

 

Tristura-punttua pixka bat uxatzeko-edo, tristurak berak bultzatuta bezala ateratzen hasi zaizkit, erdaraz (lerderaren aurka), autoaren kontrako koblatxo zomait, orain hementxe jartzen ditudanak, goiko txioaren ariora sortutako aurrenengotik hasita:

 

 

¡Por Dios! ¡De inteligencia qué derroche!

¡Otra Servidora del Infame Coche!

 

¿Será –me digo– que a algunos se les empina

con sólo pensar que al auto le meterán gasolina?

 

Ahí los ves agarrando la manguera

cual si fuera una larga polla

y al auto se la meten –aunque no entera.

 

Y llegando al Domingo

–como manda el Señor–

antes de ir al bingo

lo limpian con ardor.

 

Tan temprano, tan tempranito,

y ya va cada auto tocando su pito.

 

Con su “¡Pi-pí!” y su “¡Po-pó!”

meándose y cagando va tu autó.

 

¡Ah! Pero ahí van divertidas ellas

en sus Autos de renombre:

¡Al fin! ¡Delirio del Capital!

¡También ellas son el Hombre!

 

Hala, venga, rápido, raudo, presto

apréndete los nombres de cada marca y modelo,

que ni por asomo

te des cuenta del camelo.

 

Y hasta a algún imbécil

le da tal emoción

que exaltado exclama:

"¡Yo, para ser feliz,

quiero un camión!"

 

Aunque te creas

astuto y cauto

sólo por usarlo

ya te mata el auto.

 

"¡Porrón-pompón!

¡Porrón-pompéro!"

va gritando tu auto

con cada pedo.

 

Con tu auto a toda hostia

vas haciendo alarde:

no sea que a nosabesdónde

llegues tarde.