Cantar del Mio Cid
Biografía:
El autor de este libro es anónimo, por lo tanto, no tiene biografía.
Resumen:
Almudafar, el rey de Granada, le quería atacar al rey de Sevilla, Almutaniz. Estos dos reyes se llevaban muy mal. Almudafar, tenía todas de ganar frente a Almutaniz, porque tenía más tropas, más contactos y etc. El Cid se enteró de esto, y le dijo al rey de Granada que por favor no atacara. Este no le hizo caso, y le atacó al rey del Sevilla, pero enseguida respondió el Cid, atacándole y derrotándole a Almudafar. Entonces el Cid se convirtió en un héroe, y el rey de Sevilla le dio el nombre de Cid Campeador.
Pero no todo era maravilloso para Cid, porque la gente empezó a hablar mal de él, por culpa de la envidia. Y al final se tuvo que ir del pueblo, porque no aguantaba más. Llegó Martín Antolinez, para proveer de bienes al Cid. El Cid se marcha, dejando a su mujer y a sus hijas en el pueblo. El Cid va caminando, y después de caminar mucho tiempo, llega al reino moro de Toledo, donde pelea con los moros. Esta batalla gana el Cid, otra vez. Por esa victoria, se le queda la clemencia con los moros.
Más adelante, el Cid se dirige al reino del rey de Barcelona, y este cuando ve esto, se pone histérico, y le ataca al Cid, pero otra vez gana el Cid.
Luego se dirige a Valencia, y poco a poco hace que todo sea suyo, derrotando a los moros. Entonces, por todo esto le perdona todo el rey de Sevilla, y le deja que sus hijas y su mujer fueran a donde él. Y aquí, sus hijas se casan con los Infantes de Carrión, y todos acaban muy contentos.
El Cid tenía un león, y cuando el Cid estaba dormido, el león se escapó y los Infantes se asustaron, aunque el Cid lo acobardó. Los Infantes, para vengarse, decidieron llevarlas a las hijas del Cid y maltratarlas por el camino. El Cid se enteró de esto, y después de hablar con el rey don Alfonso, se fue a por sus hijas a Carrión, y después de luchar mucho, los Infantes le devolvieron sus hijas.
Luego entraron en la corte de los Infantes de Navarra y Aragón, y los Infantes de aquí le pidieron al Cid la mano de sus hijas. El Cid lo aceptó esa propuesta, y de nuevo puso el asunto en las manos del rey don Alfonso. Los del Cid volvieron a Valencia, y sus hijas se casaron con los infantes de Navarra y Aragón, y todos acabaron muy contentos.
Iruzkinak
2008-06-09 11:29 #1
ola ke tal pos aki dejnadole mi firma<br>
2009-04-05 22:27 #2
Utzi iruzkina: