inmigrazio lege berria
Diputados debaten nueva ley de inmigración
Las organizaciones pro derechos de los inmigrantes se oponen al proyecto de ley de Nicolas Sarkozy por considerar que instaurará una "inmigración desechable".
(© Unidos contra una inmigración desechable)
Los diputados franceses examinan, a partir de este martes, un proyecto de ley elaborado por el ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, tendiente a endurecer las condiciones para el ingreso e instalación de los extranjeros, así como para la adquisición de la nacionalidad. La reforma pretende eliminar la posibilidad de que los indocumentados sean regularizados automáticamente al cabo de diez años de residencia en Francia, como sucede actualmente, y restringir el derecho a la llamada “agrupación familiar”, es decir, el otorgamiento de visas de residencia para los familiares de un inmigrante legalmente establecido. Se trata --según palabras del ministro Sarkoz-- de favorecer una "inmigración escogida", en lugar de una "inmigración padecida".
Entrevistados: Pascal Drouaud, portavoz del partido de gobierno, Unión por un Movimiento Popular (UMP), del cual Sarkozy es presidente. Bernadette Hethié, portavoz del Movimiento contra el racismo y por la amistad entre los pueblos).
Por Alexandra Pineda
Artículo publicado el 02/05/2006 en: http://www.rfi.fr/actues/articles/077/article_832.asp
Amnistía Internacional critica el proyecto de ley
BAIONA
Amnistía Internacional muestra su preocupación por las medidas previstas en la propuesta de ley en lo referente a las personas que solicitan asilo. El movimiento a favor de los derechos humanos expresa su preocupación en torno a tres puntos. Se opone firmemente a la utilización de listas de países «seguros», pretendiendo con ello restringir el acceso a un procedimiento de asilo equitativo, y denuncia también el criterio de celeridad impuesto a los solicitantes de asilo. Le inquietan asimismo las disposiciones del proyecto de ley según las cuales se pretende organizar la salida de las personas a las que les han sido desestimadas las demandas con la mayor rapidez posible, sistematizar su detención y alejarlas lo más rápido posible del Estado francés. Amnistía Internacional denuncia, por otra parte, el hecho de que en el texto legal se pretenda reducir el periodo de recurso a quince días, un procedimiento que considera perjudicial y que tendría como finalidad facilitar y multiplicar los rechazos.
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