La autopista ferroviaria

Diario Vasco

Según el portavoz de la coordinadora de asociaciones de defensa ambiental de Iparralde (CADE), Víctor Pachon, la autopista ferroviaria (camiones enteros o remolques en vagones especiales de TAV) no es una buena solución. Es un despilfarro de espacio y de peso neto transportado (y por tanto también de energía). Al cargar un tráiler en un vagón se duplica el peso de la masa a mover. Y como el volumen de los vagones es mayor que el convencional, para poner en marcha una autopista ferroviaria como mínimo habría que ampliar todos los túneles del ferrocarril (130 millones de euros). Un sólo vagón cuesta 400.000 euros. Sería, por lo tanto, demasiado caro. La autopista ferroviaria Perpiñan-Luxemburgo ha perdido dos millones en 2008 y hoy pierde 15 céntimos por kilómetro y por camión. Con un total de 1.050 km., esto supone una pérdida de 150 euros por camión transportado; por mil camiones al día, 300 días al año, lo que suma son 4,5 millones de euros perdidos. Por todo ello pensamos que una de las principales razones del Gobierno Vasco al defender el TAV, es decir, quitar mil camiones al día de la carretera, hace aguas por todas partes.