Guerra Civil española

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

La guerra civil española comenzó cuando el militar Francisco Franco planeó un golpe de estado con interés de arrebatar el gobierno al pueblo español. Este enfrentamiento lo hizo con ayuda de los generales José Sanjurjo y Emiliano Mola, con la intención de que el general Sanjurjo fuera el jefe del estado español, pero este murió en un accidente de aviación en 1932.

        Los últimos detalles de la sublevación se concretaron durante unas practicas realizadas el 12 de julio en el valle del Llano Amarillo, en Marruecos, estando previsto dar el golpe de Estado escandalosamente, el 18 en Marruecos y el 19 en el resto de España.

        El 17 de julio por la mañana en Melilla, tres coroneles que conocían el alzamiento militar se reúnen en el departamento cartográfico y piensan en algún plan para ocupar 18 edificios públicos, plan que comunica a los dirigentes  falangistas. Uno de los falangistas informa al dirigente de la Unión Republicana, llegándole la información al general Romerales, comándate Militar de Melilla. Entonces, este envía a una patrulla de soldados al departamento cartográfico. Pero el coronel llama al cuartel de la Legión, para que les envié varios grupos legionarios, ante estos, la patrulla de Romerales se rinde y el Mola decide adelantar las fechas previstas. Por lo que al día siguiente, el 18 de julio del año 1936, la sublevación de generaliza en casi toda España, y el 19 de julio y Mola ya es general.

        Excepto casos aislados, lo militares triunfan en la mayoría de las zonas donde las candidaturas de derechas ganaron en las elecciones de febrero de 1936, y fracasan donde la victoria electoral correspondió al Frente Popular, como Madrid y Barcelona. Así, el 21 de julio los falangistas tomaron el control de Marruecos, las islas Canarias, las islas Baleares, la sierra de Guadarrama y el río Ebro, excepto Asturias, Cantabria y el País Vaco. El 27 de julio de 1936 llegó a España el primer escuadrón de aviones italianos enviado por Mussolini.

Por otra parte, caen en manos de los sublevados algunas de las ciudades andaluzas más grandes, incluyendo Sevilla, Cádiz, Granada y Córdoba.