Hombre-masa
¿Pertenece Ortega a la masa?
Tras la lectura de La rebelión de las masas esta es la primera pregunta que me planteo a mi mismo y también, porque no, a Ortega. Digo que también se lo preguntaría a Ortega, porque aunque él sea el primero en criticar y definir como hombre-masa a los miembros de las muchedumbres que existen tanto en la sociedad actual como en las anteriores, él mismo (yo también), cumple el estereotipo de dicho hombre-masa. A caso el no habla con petulancia y autoridad de todo porque domina diferentes parcelas del saber? La panorámica que tiene del mundo, por ejemplo, cuenta solo con Europa y América del Norte, es decir, cuando Ortega expone la revolución de las masas, o menciona a la Humanidad, solo se refiere a siete u ocho naciones, excluyendo la riqueza histórica y cultural de otros países (comprensible tomando en cuenta de que solemos aplicar el europeismo en muchos ámbitos).
Además, Ortega defiende la idea de que el Estado perfecto se caracteriza por un modelo elitista en el cual los mejor preparados serian los gobernantes y por tanto opina que los filósofos ( él ) deberian llevar a cabo tal función: ¿ Pero acaso el hecho de ser filósofo determina que seas el mejor preparado? Esta élite conforma la minoria: el grupo de indibiduos especializados que tienen como función guiar a la masa; ¿No les recuerda este modelo a los sistemas jerárquicos, tales como la dictadura o la monarquia?
Por otra parte, intenta convencernos de que la unificación de Europa para formar un Estado supranacional está predestinada, argumentando que desde hace tiempo los pueblos europeos forman una única sociedad; una colectividad. Define al Estado como una perfecta unión entre personas que buscan tener más poder sin tomar en cuenta que la realidad de algunas naciones es que se han formado por haber sido anexionadas por
Cierto es que el ser humano por naturaleza siente la necesidad de pertenecer a un grupo porque nos proporciona seguridad pero no por ello debemos dejar de ser individuos únicos, no debemos de actuar de tal manera por miedo a sentirnos rechazados. Esto es posible cuando somos conscientes de nuestra pertenencia a un determinado grupo, pero la cuestión es que la mayoría de nosotros no somos conscientes de que somos parte de una gran masa que manipulan a su antojo tanto banqueros como grandes empresarios valiéndose de que tienen el control de los medios de comunicación ( principal instrumento de poder). Por lo tanto, estoy seguro de que si Ortega y Gasset viviera en nuestros tiempos no definiría al hombre-masa como al grupo de personas que ignoran su pasado, sino al grupo de personas que ignoran el presente.
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